Con la llegada de Hannes Herrmann al equipo de la nueva marca francesa Crewkerz, pedimos a Christian Gugliotta, el jefe de la marca, poder probar su nueva bicicleta, la Freed 26″. Después de una muy bella aventura con Atomz, Christian se ha vuelto a lanzar con una nueva marca, con el objetivo de ofrecer bicicletas fiables y bien acabadas a precios muy asequibles.
La bicicleta
Para comenzar, la primera cosa que salta a la vista es el color verde mate, nunca visto antes en una bicicleta de trial de serie. Dependiendo del gusto es una bicicleta que no deja indiferente, o gusta o no gusta. La segunda cosa que destaca es la distancia entre ejes corta (1070mm). En los últimos tiempos, la moda está en distancias entre ejes largas (cerca de 1095mm), pero la Freed 26″ rompe la tendencia.
El acabado del conjunto del cuadro y la horquilla es de una muy bella calidad. 2 tubos redondos se utilizan para el triangulo delantero, acabado en una pipa de dirección equipada con un juego de dirección semi-integrado. La unión esta reforzada por una generosa placa situada entre la pipa de dirección y el tubo diagonal. El triangulo trasero esta compuesto tubos de sección redonda y vainas con sección cuadrada. Están conectadas por terminaciones que inspiran mucha confianza, y el vínculo entre las vainas y los tubos superiores nos recuerda una antigua marca francesa, pero en esta ocasión sin el acabado pulido. El objetivo es poder soldar las vainas lo más adelante posible con el tubo superior, y añadir un tubo entre las vainas en forma de arco para soldarlo todo como un bloque.
La horquilla sigue siendo clásica, utilizando las patas en aluminio y el tubo vertical en acero. Una cosa importante, sabemos que las horquillas equipadas con frenos de llanta suelen presentar problemas de fiabilidad a largo plazo, para evitar este riesgo, las soldaduras de los soportes son más alargadas, ofreciendo un mejor reparto de la tensión mecánica.
Los componentes son valores seguros. Los frenos se han confiado a los hermanos pequeños de los Magura HS33, los HS11, que utilizan las mismas pinzas pero con las manetas de plástico. Las ruedas están compuestas por llantas de pared simple, de 39mm delante y 47mm detrás y bujes con rodamientos anulares. La conexión al suelo se confía a los neumáticos Maxxis High Roller light con goma Super Taky.
En cuanto a la transmisión, los míticos pedales VP de doble caja hacen su reaparición unidos a las bielas en aluminio de 175mm. El piñón de 18 dientes tiene 6 trinquetes y 72 puntos de anclaje. La cadena KMC sirve de unión con el piñón fijo de 15 dientes.
Es importante destacar que el tensor de la cadena unido al eje se integra perfectamente con el cuadro y funciona perfectamente.
Cuenta con una potencia de 120mm 25º y de un manillar de 680mm de ancho.
En pista !
Al manillar de la Freed 26″, la primera sensación es muy buena, pero la anchura de 680mm puede sorprender a los pilotos acostumbrados a pilotar con manillares de 720 mm. En plano, el equilibrio es perfecto, gracias a una altura razonable del pedalier junto a un manillar suficientemente alto. Gracias a esta posición, los desplazamientos de la rueda delantera se hacen con facilidad y precisión, a pesar de una pequeña sensación de pesadez, debida a la estrechez del manillar. La bicicleta nos pedirá un poco más de esfuerzo para desplazar la rueda trasera, así como para las transferencias o los encadenamientos a rueda trasera.
En los pasos a delantera, hace falta adaptarse, ahí se nota la distancia entre ejes corta, si no se hace bien el gesto, la Freed no perdona los errores. Para superar correctamente los márgenes, las picadas con la rueda delantera están a la orden, pero no hay que dudar en picar muy abajo y proyectar bien la bicicleta hacia adelante con los brazos para finalizar correctamente el gesto. Una vez hayáis comprendido la forma de hacerlo, os propulsará a lo más alto de los grandes obstáculos. Para los bunny hop, sentimos también una ligera pesadez en la parte delantera, pero nada importante.
Para colocar la rueda delantera durante los transfers, podéis trabajar bien la flexión de las piernas, pero es importante hacer un efecto muelle para pasar correctamente. A pesar de su geometría corta, para los laterales también hace falta amplificar la flexión de las piernas para conseguir llegar a lo alto del obstáculo.
Conclusión
La Crewkerz Freed 26″ es una bicicleta muy bien lograda y bien acabado, con unos componentes a la altura de su atractivo precio (998 €). Ofrece un comportamiento rígido y vivo, y con algunas modificaciones mínimas puede convertirse en una arma formidable.
Ficha técnica
| Cuadro : aluminio | Horquilla : Patas de aluminio, tubo vertical de acero |
| Potencia : 120 mm ´ 25° | Manillar : aluminio 680 mm |
| Freno delantero : Magura HS11 | Freno trasero : Magura HS11 |
| Pastillas : Crewkerz | |
| Bielas : Trial 175 mm | Pedales : VP doble jaula |
| Piñón : 18 dientes, 72 puntos de anclaje, 6 trinquetes | Piñón fijo : 15 dientes |
| Cadena : KMC K810 | Tensor : dobles rodillos fijados al eje de la rueda |
| Rueda delantera : pared simple 39 mm | Rueda trasera : pared simple 47 mm |
| Neumático delantero : Maxxis High Roller Super Taky light | Neumático trasero : Maxxis High Roller Super Taky light |
| Precio : 998 € |
Geometría
Distancia entre ejes : 1070 mm
Vainas : 380 mm
Pedalier : +45 mm
Ángulo de dirección : 71.5°
Peso verificado : 10.0 kg
Test : Alexandre Maynadier – Fotos : Christopher Franck
